Tahití, históricamente llamada Otaheite, es la isla más grande de la Polinesia Francesa, territorio de ultramar francés localizado en las islas de la Sociedad, al Sur del océano Pacífico. Haití, tiene estatus de territorio semiautónomo de Francia y cuenta así con su propia Asamblea. Su capital es Papeete ("agua de la cesta") y en ella viven 127.500 habitantes. Está formada por dos porciones de tierra conectadas por el istmo de Taravao: Tahiti Nui o Gran Tahití, ubicada al noroeste y Tahiti Itio Pequeña Tahití, ubicada al sureste. En total el territorio comprende unos 1.042 km² y su punto más alto es el monte Orohena. Uno de los mayores placeres que nos ofrece este archipiélago es poder disfrutar del máximo confort de sus magníficos bungalows sobre el agua y de sus lujosos resorts que se han implantado en islas como Tahití, Bora Bora, Moorea, o los atolones de Rangiroa o Tikehau.

Y es que pocas experiencias son tan relajantes y evocadoras como sumergirse en un baño de burbujas en el jacuzzi de la terraza disfrutando de la suave brisa del Pacífico. Una sesión de Spa para dos en alguno de los lujosos centros repartidos por sus islas es otro de los pequeños placeres que nos ofrece este delicioso país. En Bora Bora, encontramos también una oferta de tratamientos que incluyen también sesiones de talasoterapia, únicos en el Pacífico, que aprovechan los beneficios de las aguas marinas para los cuidados de belleza. Sus fórmulas, especialmente pensadas para parejas, incluyen el disfrute de sus productos tradicionales tahitianos como el famoso aceite de monoi o la vainilla de Tahití.

Todas sus islas están salpicadas de pequeños islotes, conocidos como 'motus' en tahitiano y de playas blancas y desiertas sólo accesibles por barco, por ello os proponemos pasar un día en sus playas vírgenes degustando langosta fresca al grill acompañado de un exquisito champán. Todos los resorts ofrecen 'picnics-gourmet' para pasar una jornada en un motu, acompañados por un chef que prepara el ambiente, decora la mesa a la sombra de un cocotero y cocina el almuerzo con deliciosas especialidades francesas y tahitianas. Tras servir la comida, la pareja disfrutará de una total intimidad.

Para los más deportistas y aventureros os proponemos una excursión en quad por Moorea recorriendo los senderos menos transitados de la isla, dominados por paisajes naturales impresionantes que pueden pasar de bosques tupidos de castaños tahitianos a amplios valles cultivados con piñas y palmeras. No olvidéis tomar una foto desde el mirador Belvedere donde convergen sus picos ya que ofrece unas vistas portentosas de la laguna. Esta pequeña isla rebosa encanto y se encuentra a sólo media hora en ferry desde el puerto de Tahití.

Por último, para los amantes de los souvenirs, os proponemos una escapada a Papeete. En su mercado y en sus pintorescas calles de los alrededores encontraréis joyas, ropa, pareos, artículos decorativos y artesanía local. Sin duda disfrutaréis de una divertida jornada eligiendo los detalles para vuestros familiares y amigos. Como colofón, si sois amantes de las joyas no olvidéis traer el regalo más típico de todos: una de sus preciadas perlas negras.